Estoy agobiada... los apuntes me comen por todas partes... esta mañana me planteaba si me merece la pena seguir con las oposiciones... si de verdad este es mi sueño.Solo me ha hecho falta levantar la vista hacia la pared y ver la postal que me regalaron mis niños el año pasado al terminar las prácticas.
Claro que merece la pena... los momentos que viví con todos ellos compensan con creces los malos momentos de estudio y las inseguridades.Porque mis niños del 2005: Paula, Sheila, Izan, Oscar H, Miriam, Daniel, Sergio G, Ainhoa, Estela, Mireia, Guillermo, Jonathan, Alejandro, Maria, Jessica, Lucia, Edith, Oscar O, Sergio B, Javier, Victor, Sergio R, Jean Carlo, Kevin y Mario.
Y mis niños del 2006: Maria P, Lucia, Tatiana, Cecilia, Diego, Roberto, Zara, Desireé, Adrián, Alejandro, Claudia, David, Michelle, Javier, Sara, Jesús, Raúl, Cristina, Sergio, Jedidiah, Maria A y Daniel.
Han sido lo mejor de toda la carrera, porque fui feliz mientras estuve con ellos, porque aprendí más de lo que nunca me enseñó nadie... porque cualquier cosa merece la pena cuando tiene por recompensa la sonrisa de un niño.
1 comentario:
La sonrisa de un niño es lo que hace que el mundo siga su curso, suena cursi si, pero es así. Tú serás la mejor de las seños, me encanataría estar allí cuando tenga a mis niños, para que les esnseñarás tú!!
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