domingo, 27 de abril de 2008

....


Una mirada al cielo, un beso cargado de amor y añoranza que sé te llegará.
Aún se me hace difícil vivir sin ti.
Te echo de menos... mucho.
Felicidades, donde quiera que estés.

miércoles, 23 de abril de 2008

Castilla, canto de esperanza.

Mil quinientos veintiuno,
y en Abril para más señas,
en Villalar ajustician a quienes justicia pidieran,
en Villalar ajustician a quienes justicia pidieran.
Malditos todos aquellos
que firmaron la sentencia,
malditos todos aquellos los que ajusticiar quisieran
al que luchó por el pueblo y perdió tan justa guerra.
Desde entonces ya Castilla no se ha vuelto a levantar,
en manos de rey bastardo o de regente falaz,
siempre añorando una Junta o esperando un capitán. (2)
Quién sabe si las cigüeñas han de volver por San Blas,
si las heladas de Marzo los brotes se han de llevar,
si las llamas comuneras otra vez crepitarán.
Cuanto más vieja la yesca más fácil se prenderá,
cuanto más vieja la yesca y más duro el pedernal,
si los pinares ardieron aún nos queda el encinar.


[Nuevo Mester de juglaria]




Homenaje a todos aquellos castellanos que murieron el 23 de Abril.
¡Feliz día de la comunidad a todos los castellano-leoneses!

martes, 22 de abril de 2008

Recuerdos

Son tan gratos los recuerdos de aquella tarde de 22 de abril que daría todo lo que tengo por volver atrás.
Qué fácil fue ser feliz aquel día.

Un año más tarde, con todo patas arriba, la felicidad es incompleta... pero si tenemos que morir, que sea matando.

viernes, 11 de abril de 2008

Personajes.

Desde que escribo, que no es hace mucho, siempre me ocurre lo mismo. Mis personajes se adueñan de mi, soy capaz de pasarme horas pensando en ellos, en su forma de actuar, en la personalidad de la que los he dotado, de qué dirían y cómo actuarían ante determinada situación.
Me he sorprendido buscando un momento para encontrarme con ellos, como si Alex, Valeria, Laura, David o Coralinda, y todos los demás, fuesen capaces de saltar del papel, como si ellos me llamasen para charlar mientras acompañamos nuestras palabras con un café o una cerveza bien fría.
Eran mios, solo mios, solo yo sabía como iban a responder, como iban a moverse o a actuar... me sentía comprendida por ellos, donde muchas veces mi otro yo decidía alojarse un tiempo, en ellos encontraba la respuesta de lo que a mi me pasaba...
Suena extraño, lo sé, pero he soñado incluso con ellos.

Ahora me ocurre algo más extraño aún. Los que se adueñaron de mi son otros, son los personajes que otros crearon, pero que yo adopté como mios, a los que yo, respetando su personalidad, les aporté matices nuevos, a los que yo quiero como mios.
De nada sirve pensar como lo haría yo, pues estos no se dirigen al ritmo de mis pulsaciones en el teclado, de nada sirve imaginar el siguiente paso, el siguiente gesto, pues dificilmente coincidirá con el que sus verdaderos "padres" les harán dar.
Aún así, y a pesar de la distancia que nos separa, también acabarán bailando a mi ritmo.

Quizás...

Hoy me he dado cuenta de que os he perdonado… a los dos, y a mi misma. El triángulo cayó por uno de sus vértices, quien sabe si pudo haber caído del otro lado.
Hace unos días me di cuenta de que ya lo había superado, hoy caí en la cuenta de que os perdoné.
Perdono pero no olvido… al menos de momento, imposibles tampoco me voy a pedir, y no sé ser tan hipócrita, ni tan tonta, como para sonreír y decir “aquí no ha pasado nada” porque pasó, pasaron demasiadas cosas… quizás algún día esto se convierta en la novela “best seller” que siempre soñé escribir.
He descubierto que os eché la culpa de todo, después me culpé a mi misma y por último me compadecí, me compadecí de lo que me había pasado hasta que me dolió tanto que no podía seguir adelante con ello como carga. Me di pena a mi misma, y busqué, quizás, la pena de los demás. No lo provoqué, pero tampoco lo supe evitar, a pesar de que en algún momento el mango de la sartén lo tuve yo.
No me arrepiento de haberte querido, de haberte amado, al contrario, te daré las gracias por haberme hecho sentir lo que sentí contigo a mi lado, soy afortunada, me enamoré, y hay quien, jamás en su vida, ha experimentado esta estupenda sensación.
Hoy cerré el capitulo definitivamente, hoy miro al frente con un futuro sin nubes, tan solo un cielo despejado… Me sonroja pensar que las piernas ya no me tiemblan por ti sino por otro… me parece imposible que el dueño de mis sonrisas tontas sea otro, que suspire sin pensar en ti… se me hace tan raro que no seas tú quien ocupe mis pensamientos… ya no es tu nombre el primero que se me pasa por la cabeza, sino el de otro… quizás me esté volviendo a enamorar…

martes, 8 de abril de 2008

Nada de pensar.

Una vez conocí a alguien que decía que: "pensar escuece", enciendo la radio y una canción me cuenta que: "y por pensar tengo un millón de cicatrices" y en mi fonoteca particular se me viene a la cabeza un: "vale de pensar"
Decisión tomada, no se piensa más, a partir de ahora 1º actúo y después, si eso, ya me pongo a pensar.

Llueve.

Llueve y lo odio...
Sí, lo sé, soy consciente, no me lo repitáis una vez más, necesitamos este agua, es necesario que llueva y debería llover más...
Pero a mi me deprime, me pone triste, me encierra en mi lado más gris, así como el día.
Parezco un oso enjaulado, me provoca nerviosismo, me baja el ánimo hasta límites insospechados...
Seré demasiado rara... pero odio que llueva.

Insomnio

Cómo echaba de menos esos mensajes antes de dormir...

miércoles, 2 de abril de 2008

Aquella sombra...

Hoy voy a ser mala contigo. No lo voy a hacer por divertirme, no lo voy a hacer por rencor, ni siquiera para joder, simplemente voy a ser mala contigo porque te lo mereces.
He aguantado tanto en estos últimos tiempos, he pasado por tantas etapas en mi vida, que no me voy a permitir entrar en la próxima contigo como equipaje.
Hasta ahora me había limitado a estar aquí. Aquí estuve cuando me necesitaste, aquí estuve cuando no me correspondía, aquí estuve siempre que quisiste algo. Pero ahora no estoy. Hice lo último que tenía que hacer, y una vez hecho se acabó definitivamente. Sé que lo he dicho alguna vez más, sé que lo he pensado millones de veces, pero ahora sí se terminó.
Porque me he dado cuenta que no me merezco a alguien como tú, porque me has demostrado tantas veces lo poco que vales, lo poco que te importa aquellos que están más allá de tu ombligo. Porque no has sabido ser aquello que tanto me gustaba de ti, la persona que siempre se preocupaba por mi, aquel que algún día me cuidó, aquel que en algún momento supo leer mis ojos...
Pero todo aquello se queda pequeño ya, tan lejano que nunca pareció existir. No te deseo ningún mal, ni tampoco ninguna prosperidad, simplemente he dejado de desear nada para ti, no te odio y tampoco te quiero, me he limitado a no tener ningún tipo de sentimiento hacia a ti... qué pena, donde tanto hubo ahora no queda hueco para nada...
Algún día, en el largo camino de la vida, sé que nos volveremos a encontrar, no te extrañes si no te miro, simplemente no te veo, te convertiste para mi en una pequeña sombra que no está al alcance de mi vista.

Volver

Volver a ver tu luz, sentir tu olor, esos rayos de sol que calientan mi cara mientras tus frías nieblas hielan hasta los huesos.

Dicen que los que somos de por aquí somos antipáticos, rancios, esquivos... qué poquito mundo han visto aquellos que lo afirman.

Estos días lejos de ti he descubierto que, a pesar de no tener playa, ni montaña, ni ser la más grande, ni, probablemente, la que más encanto tenga, no te cambio por ninguna.

Porque me siento ahogar cuando no estoy aquí, porque la luz no parece la misma, porque yo no soy la misma cuando no estoy aquí.

Me han discutido que de aquí a unos años siga pensando igual... pero yo te garantizo, a ti y a quien haga falta, que seguirá siendo así. No puedo, no quiero, renunciar a ti, no quiero echar raíces en otras tierras donde sé que nunca seria feliz.

Y es que... ¿Qué le voy a hacer si estoy enamorada de mi tierra?